Las ruinas de Cochapata Imprimir
Escrito por Alexander von Humboldt   
Miércoles, 02 de Abril de 2008 20:07
Entre Nabon y Cochapata existen todavía las ruinas de un palacio del Inca (Ingapirca) o mas bien, a juzgar según la cantidad de muros de 4 pies de altura, de las ruinas de un pueblo entero, ‘un sitio real’. La casa principal tiene 60 pies de largo por 15 de ancho. No se distingue una división de apartamentos. Las piedras de estos edificios no son talladas como las del Callo, sino sin trabajar. Tienen argamasa, una mezcla de arcilla y de pequeños guijarros en los intersticios de las piedras. Tambien observamos un dique de mampostería, que va del este hacia una colina y termina con la casa grande; suponemos que servía para conducir el agua, una acequia. Muy cerca de este dique se ven las ruinas de una torre circular de apenas 20 pies de diámetro. En el Páramo de Sanar tambien debe haber vestigios de un palacio del Inca; no lo hemos visto. Esto habla a favor de lo que se ha dicho del camino del Cusco. Obsérvese que el Ingapirca del Azuay está a 2.146 toesas, el del Cañar a 1.520 toesas, el de Cochapata a 1.360 toesas, todos en lugares muy fríos, muy desagradables, "desabrigados". Se puede decir que los soberanos, acostumbrados al espantoso clima del Cusco, buscaban en todas partes sitios parecidos a los de su patria. Pues estos palacios no pueden haber sido refugios en países donde a causa del frío se los necesitaba más, porque en este caso sería un solo palacio y no un conglomerado de casas, que indican que el Inca tenía allí su residencia por mucho tiempo.

Viaje de Cuenca a Loja (17-23 de julio de 1802). En Alexander von Humboldt. Diarios de viaje en la Audiencia de Quito, Segundo E. Moreno Yánez, ed., pp. 223-224, Oxy, Quito.